LA FUGA DE TUS PESTAÑAS
Chantaje Lunar
Este anochecer de espejos;
Esta neblina veneciana en la mirada,
se confabulan con tu silencio para mortíficarme...
Tengo el índice de Lord Byron
apuntando al otoño enamorado de mi sien,
pero las melancolías de Londres me perturban,
y vuelco mis iris a tu nombre.
Plenilunio en flor
que subyuga mi aliento lleno de ti,
cuando Morfeo se desvela;
Y es que la música se ha vuelto luz,
y va por ahí aureando sombras con tu voz...
Hechicería sonora y mayestática
me tiene cautiva en palaciegos ensueños,
pero no puedo escuchar tu partitura interior,
por más que lo intente.
No es que me queje,
pero ese renacimiento de los perfumes
y las delicadezas,
en cada alegoría que inspiras,
está enfatizando la pasión bohemia...
Chantaje lunar que a los ojos de las liras
derrama lluvia de amor...
¿Serán acaso las violetas lagrimosas de Cecilia,
las que reviven sobre mí al escribirte?
¿O es la parisina exquisitez de Octubre,
con el pincel aterciopelado de Monet
la que atrapa tu preciosidad en un suspiro?
Alfabeto de dudas
suspendido en la diagonal del insomnio
enumera tu ausencia.
Y es que observándote
se poetizan los vapores nocturnos de mi ansiedad,
con tal premura romántica,
que al chocar contra la fuga de tus pestañas,
me hacen chantaje lunar.
Serenata de rosas fulgidas y acarameladas,
que al relicario de mi corazón
pulsan la sangre misteriosa de un millón de versos.
¿Será tal vez que en la escala de colores brillantes,
tú eres un nuevo matiz?
¿O será que te veo con las pupilas poseídas de Lady Byron,
esa que cuando me ve llorar
susurra tu grandeza a los oídos de las estrellas?
Yolanda García Vázquez
D@R 🇪🇦
LA FUGA DE TUS PESTAÑAS
Chantaje Lunar
Este anochecer de espejos;
Esta neblina veneciana en la mirada,
se confabulan con tu silencio para mortíficarme...
Tengo el índice de Lord Byron
apuntando al otoño enamorado de mi sien,
pero las melancolías de Londres me perturban,
y vuelco mis iris a tu nombre.
Plenilunio en flor
que subyuga mi aliento lleno de ti,
cuando Morfeo se desvela;
Y es que la música se ha vuelto luz,
y va por ahí aureando sombras con tu voz...
Hechicería sonora y mayestatica
me tiene cautiva en palaciegos ensueños,
pero no puedo escuchar tu partitura interior,
por más que lo intente.
No es que me queje,
pero ese renacimiento de los perfumes
y las delicadezas,
en cada alegoría que inspiras,
está enfatizando la pasión bohemia...
Chantaje lunar que a los ojos de las liras
derrama lluvia de amor...
¿Serán acaso las violetas lagrimosas de Cecilia,
las que reviven sobre mí al escribirte?
¿O es la parisina exquisitez de Octubre,
con el pincel aterciopelado de Monet
la que atrapa tu preciosidad en un suspiro?
Alfabeto de dudas
suspendido en la diagonal del insomnio
enumera tu ausencia.
Y es que observándote
se poetizan los vapores nocturnos de mi ansiedad,
con tal premura romántica,
que al chocar contra la fuga de tus pestañas,
me hacen chantaje lunar.
Serenata de rosas fulgidas y acarameladas,
que al relicario de mi corazón
pulsan la sangre misteriosa de un millón de versos.
¿Será tal vez que en la escala de colores brillantes,
tú eres un nuevo matiz?
¿O será que te veo con las pupilas poseídas de Lady Byron,
esa que cuando me ve llorar
susurra tu grandeza a los oídos de las estrellas?
Yolanda García Vázquez
D@R 🇪🇦
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.