EL ATARDECER DE LA VIDA
Un boceto amarillo de sueños antiguos
va perfilando el atardecer de la vida;
Los mismos que no más ayer
marchitaron la flor de tus flores...
Se entremezcla la pesadumbre del rey sol
con retales de alegrías muertas;
Descosida del tiempo, te evades...
Hay tanto polvo en el alma
que ya hueles a soledad...
¡Quien pudiera ser lira de sus manos
flotando en el viento, perfumada de él..!
No hay rocío en el jardín de sombras que avive tu pulso...
Ya los velos crepúsculares cubren de melancolía
el páramo de los encantos;
Cae el otoño sobre tu falda de versos,
y se cubren de noche tus horas, tus manos, tus ojos...
El día fallece como lo hacen las promesas
cuando están hechas de nada...
Al tacto de luna tu ser eriza el silencio,
y mueren como insensatas mariposas
todas las fantasías del amor...
Se estremece el rosal de los ayeres felices
al escuchar tu adagio de lágrimas,
y voltean los ángeles la pesadumbre del cosmos.
Demasiado tarde para soñar...
La muerte se te antoja un remanso poético;
Allí donde las deudas de sangre no empozoñen tu espíritu.
Lo sabes, ya no hay salida;
Ha llegado el atardecer...
Yolanda García Vázquez
D@R 🇪🇸